Señor Presidente: converse con los marchistas indígenas para evitarles nuevos sacrificios

De acuerdo a la resolución del Tribunal Constitucional Plurinacional, pese a que tendría que ser explicada y enmendada, usted señor Presidente debe conversar y conseguir un acuerdo con los verdaderos pobladores del TIPNIS para que otra vez hagan conocer su decisión sobre el camino de la discordia, aunque ya han dicho que no se oponen a una vía que se construya por fuera de la reserva natural y del territorio indígena. Hablamos de una consulta que no es ni previa, ni de buena fe, ni informada. Por eso, creemos, que la mayoría del pueblo boliviano la rechaza.
Esa consulta que organiza el gobierno, en la que es juez y parte, como dice uno de los miembros del Tribunal Constitucional, contradice la Constitución Política, el Convenio 169 de la OIT y la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas.
Estamos convencidos de que los indígenas, que marchan por novena vez por la vida en el TIPNIS, esperan conversar con usted señor Presidente en cualquier pascana, como podría ser Yolosa.
De usted depende señor Presidente para que los indígenas de la IX marcha eviten más sacrificios, como las dos vidas de líderes de esos pueblos en un accidente que no hubiera ocurrido si nuestros hermanos (Silvia Otilia Cunay y Alejandro Cayuba) no se hubieran visto obligados a marchar en defensa del TIPNIS, que pertenece los bolivianos y a los latinoamericanos.
Por eso, una vez más se equivoca su Ministra de Comunicación (que al parecer olvidó su pasado) cuando dice que usted no puede dialogar con los indígenas en el camino porque ese ejemplo le obligaría a concurrir a todos los lugares en los que se desarrollen conflictos. También se equivoca su ministro de Gobierno cuando pregunta a los dirigentes de la IX marcha cómo llegar a un acuerdo entre ellos (que no quieren el camino por medio del TIPNIS para preservar su hábitat natural) y unos pocos indígenas que dejaron de vivir en comunidad y muchos cocaleros que quieren las tierras del TIPNIS para plantar más coca.
Sus ministros, pensamos, deben facilitar el diálogo suyo, señor Presidente, con los indígenas marchistas que lo siguen esperando, porque ellos confían en el poder de la palabra.
Señor Presidente: converse con los marchistas, así podría ahorrar nuevos sacrificios a esos esforzados caminantes. Consideramos que todavía hay algún espacio para que se reconcilie con los hermanos que nada traman para provocar su caída, como han aclarado tantos veces.
Le decimos francamente señor Presidente: usted tendría que encabezar la defensa del TIPNIS. Y nos parece que tiene la oportunidad de conversar con los marchistas para conseguir una salida al conflicto por la reserva natural y territorio indígena, que es la que más nos une y la que más nos separa a los bolivianos.
La Paz, 20 de junio de 2012.
Por el Directorio de la Asamblea Permanente de los Derechos Humanos de la Paz

María Amparo Carvajal Baños
Presidenta