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Testimonio de vida
Marcela Barrios
(AquíCom 27-06-14) Mi meta en la vida es salir profesional y contribuir a la sociedad. Personalmente, en mi familia hemos pasado situaciones difíciles, es por eso que he estudiado la carrera de Trabajo Social. Dentro de ese plan va también otra de mis metas en relación a la familia, los niños, sobre todo, contribuir más a la sociedad.
Soy Paola, tengo 24 años y estoy en mi último año de la carrera de Trabajo Social, en la Facultad de Ciencias Sociales, de la Universidad Mayor de San Andrés.
Estudio una carrera universitaria porque creo en el hecho de poder crecer, de mejorar cada vez para ser más independiente, pero claro siempre por el buen camino. Siempre.
En la vida siempre hay problemas familiares y entre los papás ocurren separaciones. Son cosas que pasan dentro de una familia, que no son comunes. Ello muchas veces depende del tipo de personas y donde las familias necesitan apoyo o, inclusive, alguien que les pueda entender o también que vea desde el punto de vista profesional.
Ellos estuvieron a punto de divorciarse. Pero no lo hicieron y un tiempo después mi papá falleció y ya. Fue hace 10 años.
Mi papá nos decía —a mis hermanos y a mí— que tenemos que echarle ganas. Mi mamá también nos impulsaba y siempre se inclinaba por ese lado.
No recuerdo alguna frase o consejo específico de mi papá, sólo que siempre nos motivaron e impulsaron a estudiar una profesión.
Recuerdo que desde pequeña fui más independiente que mis hermanos, hacía las cosas por mí misma.
Sin embargo, viví situaciones difíciles. Y una de esas situaciones que me costó superar fue un “cacho” la muerte de mi papá. Si me ha costado un cacho superar, sobre todo por el sentimiento de culpa, en relación al perdón.
Antes que mi papá muera, dentro de la familia se vivieron situaciones difíciles. Son cosas que han marcado mucho mi vida y que personalmente me han ayudado a crecer y a madurar. Creo.
Ver la vida desde un mejor punto de vista y decir yo no quiero repetir eso en mí y en mi vida. Quiero una mejor vida para mí y si es que voy a tener un compañero de vida, también.
No quiero repetir ese tipo de cosas que se ha vivido dentro de mi familia. Las separaciones, la poca comprensión, pero sobre todo las mentiras, las mentiras que muchas veces destruyen el hogar. Bueno, siempre va haber eso y depende mucho —de cada persona— como lo supere. Depende de la madurez que cada uno y una vaya teniendo.
Este año estoy en mi último año de la carrera, prácticamente tomando ya el Taller de Grado. Estudio en el turno de la noche porque trabajo durante el día.
Trabajo en un colegio, con niños. Pero también apoyo en una parroquia los fines de semana. Es un servicio que me gusta dar como voluntaria.
Se podría decir que soy auxiliar de pre kínder. Trabajo con 30 niños, es básicamente el trabajo de profesora con los niños. Les ayudo a hacer sus tareas. Es un trabajo de mucha paciencia, y cansador.
El trabajo con niños es dinámico. Les hago jugar, aunque evidentemente cuando hay trabajos individuales, se da apoyo a cada uno de ellos.
Trabajo es este pre kínder hace dos años. Conseguí el trabajo gracias al apoyo que realizo en la parroquia de la zona 1ro. de Mayo de la ciudad de El Alto.
Voy al pre kínder en el turno de la mañana. Pero por la tarde hago otros trabajos que me dan otros ingresos porque siempre hay muchas necesidades. La universidad misma, las necesidades personales inclusive requieren tener ingresos, porque gano el salario mínimo. Además, está el hecho que los papás no siempre nos apoyan y a mí en particular, porque soy independiente.
Vivo con mi mamá y mis hermanos, pero no puedo exigir a mi mamá que me dé apoyo económico. Mi mamá ya hizo su esfuerzo y yo no puedo exigirle más. Mi mamá tiene 50 años.
Ahora me toca a mí aportar a mi casa. Ahora es por cuenta mía. Cada uno de mis hermanos trabaja y lo que cada uno gana es para que cada uno se mantenga. Tengo tres hermanos, tres varones. Yo soy la segunda mayor.
Aparte de trabajar con los pequeños en el pre kínder, apoyo a algunos compañeros de la universidad o a algunos de la parroquia. Es apoyo administrativo o transcripciones.
Entre el trabajo con los niños, los trabajos extras que hago y mis clases en la universidad a veces no me alcanza el tiempo, a veces llego tarde a clases y me quedo fuera del aula.
Muchas veces estoy muy cansada para viajar desde El Alto y otras me retrasa el tráfico. A veces no me abastece el tiempo, pero creo que siempre nos tenemos que empeñar, nos debe motivar el hecho de salir adelante y llegar o por lo menos saber qué se hizo en la clase.
Vivo en la zona Candelaria que también está en El Alto. El tiempo del viaje depende de las trancaderas (congestionamientos). Si no hay trancadera llego a la universidad hasta en una hora y si hay mucha trancadera hasta en hora y media.
A pesar que todo el trabajo que realizo es agotador, disfruto el estar con los niños y niñas. Tenía en el curso unos mellizos. Una vez un niño confundió al hermanito, a uno de los mellizos y fue a golpear al otro mellizo. Y entre golpes que van y vienen, se formó una confusión entre los mellizos.
Todos los días aprendo de su inocencia, me encanta estar con ellos, son tan inocentes. Siempre se sorprenden con cualquier cosa, aunque sea algo tan chiquito. Creo que es algo que todos deberíamos tener. Esa inocencia hace que por más que las cosas sean chiquitas, las esperan con ilusión y felicidad.
Cuando termine mi carrera quiero trabajar en mi área, pero yo sé que es difícil. Ahora mismo ejercer la carrera y conseguir fuentes de trabajo es muy difícil, sobre todo sin título. Quiero trabajar en mi área, pero aun no tengo título y por eso es difícil (AquíCom 27-06-14 MTBB).