La muerte del Presidente Chávez, después de una larga y terrible enfermedad, para todos los que aspiramos a un mundo mejor, que el actual que nos depara el imperialismo, ha sido una pérdida irreparable. Hemos visto al pueblo venezolano embargado de dolor por la pérdida de su líder, despedirle entre lágrimas y consignas, entre el pesar y la esperanza de un pueblo que ha encontrado su camino, tampoco faltó el arpa y el cuatro del joropo en el adiós al llanero de Sabaneta, tradición que se remonta desde las guerras de la independencia, cuando en el Ejército Libertador que comandaban Bolívar y Sucre, entre arengas y clarines, mandaban a tocar los bambucos neogranadinos, los sones de la nueva tierra, para alentar a los patriotas antes del combate con el ejército colonial.
En esta hora aciaga para el movimiento revolucionario de Venezuela y de América Latina, se ha escrito mucho sobre el legado que deja el Presidente Chávez, sin duda hay muchos, como su obra social con las misiones de salud, educación y vivienda, la recuperación de sus sectores estratégicos, entre ellos PVDSA, su política de solidaridad internacional y la de integración latinoamericana; pero uno de sus legados más importantes es el haber hecho renacer la esperanza en el socialismo, al que muchos creían obsoleto, ese al que llamó el Socialismo del Siglo XXI, que en su corto tiempo de aplicación en Venezuela logró significativos resultados en lo económico y social.
Otro legado importante, para hacer realidad ese socialismo, fue la creación del Partido Socialista Unido de Venezuela PSUV, porque comprendió que para dirigir un proceso revolucionario en medio de una intensa lucha de clases al interior del país y el acoso imperialista externo, se necesitaba una fuerza organizada y disciplinada con una ideología revolucionaria, adaptada a las circunstancias históricas concretas de Venezuela, que integró el pensamiento bolivariano con el pensamiento socialista actual. Para movilizar al pueblo y las organizaciones sociales, propensas a la dispersión política e ideológica hacía falta el partido, en ese sentido fue un visionario. Las vicisitudes que pusieron en peligro su vida, cuando el Caracazo y el fallido golpe de Carmona, comprendió que la naturaleza humana es efímera, pero queda el partido para continuar y profundizar la lucha revolucionaria y así se demostrará en la lucha que se avecina contra la reacción interna y el imperialismo.
La necesidad de crear el PSUV, la asimiló en primer lugar de la propia historia de la Gran Colombia, la que a pesar de la epopeya libertaria, el proyecto bolivariano no tuvo la organización política capaz de continuar la obra de los libertadores, Chávez no aró en el mar. Muerto Chávez, al revés del anhelo de la contrarrevolución interna y el imperialismo, el chavismo no ha muerto, pervive en el PSUV, en sus militantes y en el pueblo. El papel de la personalidad por muy destacada que sea influye pero no determina el curso de la historia social, los políticos derechistas, ayer golpistas y ahora campeones de la democracia burguesa, buscan causas externas para explicar el fenómeno del chavismo y no eso hay que buscar en Cuba, que lo único que ha hecho es dar el ejemplo de su heroica lucha y su solidaridad, en la práctica del internacionalismo proletario, que no son capaces de entender, ni practicar los imperialistas y sus aliados internos, y las causas están en la propia sociedad venezolana.
Nicolás Maduro, al frente del PSUV, tiene una gran responsabilidad histórica frente a su pueblo, la de continuar y profundizar la lucha revolucionaria; la derecha y el imperialismo lo han entendido bien y volcarán todo sus acciones para derrotar al chavismo sin Chávez, por eso la recomendación póstuma de Chávez de ¡unidad, unidad, unidad! de todas las fuerzas revolucionarias y progresistas es más importante que nunca.
Gloria al comandante Chávez, larga vida al PSUV, victoria al compañero Maduro, cuya procedencia obrera y la formación política en la izquierda venezolana, garantiza la continuidad de la obra revolucionaria de Chávez.
Arq. MSc René Contreras
Docente Emérito de la UMSA
LP 26/03/2013