Por Froilán González Adys Cupull
La noticia del fallecimiento de la boliviana Domitila Barrios de Chungara impactó a los amigos de Bolivia. Ocurrió el 13 de marzo en la ciudad de Cochabamba. El gobierno de Evo Morales decretó tres días de duelo. Su nombre fue repetido a través de las agencias de información de ese país. Merece recordarse y dejar que ella siga hablando con sus propias palabras, en las minas, congresos, entrevistas, escritos y libros que tal vez aún se encuentren inéditos, hay hechos que no debemos olvidar: su historia es uno de ellos.
La conocimos en la ciudad de La Paz en 1984, en un acto de solidaridad con Cuba, acababa de regresar de Suecia donde se vio obligada a acogerse al asilo después de una de las tantas persecuciones que padeció en su país, donde desarrolló un intenso trabajo político, especialmente en las minas de Siglo XX y Llallagua. Legó a la humanidad la voluntad de luchar y vencer. Poseía una simpatía muy personal y la autoestima que debe poseer la mujer de América Latina.
Parte de su lucha por las mujeres, mineros y el pueblo boliviano aparece en nuestros libros de Ñacahuasú a La Higuera y La CIA contra el Che, donde reflejamos los testimonios recogidos por el religioso Gregorio Iriarte en su tema "Los mineros bolivianos" y José Ignacio López Vigil en su obra "Una Mina de Coraje". Sobre su vida y luchas revolucionarias ha escritola periodista y narradora mexicana Elena Poniatowska. El escritor uruguayo Eduardo Galeano la presenta en su libro "Memoria del fuego" y la escritora brasileña Moema Viezzer, en "Si me permiten hablar: testimonio de Domitila, una mujer de las minas de Bolivia".
La escritora brasileña escribió: "Ella vive en dos piezas sin letrina ni agua, con su marido minero y siete hijos. El octavo hijo anda queriendo salir de su barriga. Cada día Domitila cocina, lava, barre, teje, cose, enseña lo que sabe y cura lo que puede y además prepara cien empanadas y recorre las calles buscando quien compra."
Domitila llevó a cabo una intensa lucha y expresó acertados juicios antiimperialistas. En 1967 fue acusada de enlace guerrillero e interrogada y torturada. Vivió los horrores de la masacre en la Noche de San Juan. La escritora y periodista boliviana Lupe Cajías recogió en su libro "Historia de una leyenda", referido a Juan Lechín Oquendo algunos de los crímenes cometidos contra los mineros y la menciona. Los escritores bolivianos Carlos Soria Galvarro, José Pimentel y Eduardo García Cárdenas en su libro "1967: San Juan a sangre y fuego" realizaron una profunda investigación sobre aquellos graves y crueles acontecimientos.
El dirigente minero y comunista Simón Reyes y el periodista Antonio Peredo, entre otros destacados políticos bolivianos nos hablaron de ella y David Acebey la destaca en su libro "Aquí también, Domitila" y especialmente el cineasta Jorge Sanjinés, quien dirigió el filme El Coraje del Pueblo, reproduce escenas de la masacre, donde se refleja la lucha de los mineros.
Domitila Barrios de Chungara, nació en Potosí, el 7 de mayo de 1937, hija de un dirigente sindical Benemérito de la Patria, como combatiente de la Guerra del Chaco. Cuando aún no tenía 10 años de edad murió su madre y tuvo que hacerse cargo de sus 5 hermanas.
En 1952 se casó con un trabajador minero y tuvo siete hijos. En 1961 empezó a participar activamente en el Comité de Amas de Casa del Distrito Minero, del que la nombran Secretaria General, organización que se extendió a otros centros mineros y tuvo una importante influencia en los acontecimientos políticos de Bolivia. Domitila organizó el Comité de Amas de Casa bajo los principios de velar por mejores condiciones de vida mediante la organización de todos los sectores involucrados en la lucha de los pueblos, teniendo como pilares fundamentales a la clase trabajadora y al campesino.
Domitila señalaba que la patria está en todos los rincones y puso énfasis en la unificación de la lucha con un lenguaje simple. Defendió y consolidó su lucha en defensa de las mujeres y sus reivindicaciones. En el año 1975 invitada por las Naciones Unidas, asistió a la Conferencia del Año Internacional de la Mujer, realizada en México, donde destacó su clara visión sobre los temas tratados. Con su innato liderazgo denunció que la carta magna de las Naciones Unidas, firmada también por Bolivia, era aplicada sólo para la burguesía y habló sobre la necesidad de rescatar la importancia de la lucha de la mujer.
Domitila sufrió intensa represión y prisión tanto en 1967 como en épocas posteriores, pero en ningún momento lograron destruir su fortaleza para defender sus ideas, a su gente y sus derechos.
Nota:
Agradecemos al Embajador del Estado Plurinacional de Bolivia en La Habana Palmiro Soria y a la funcionaria Patricia Jiménez la entrega de los datos biográficos de Domitila y la foto de la destacada luchadora (que no reproduce Aquí).