Un presidente indígena que ignora el Día del Indio

Claudia Angélica Villca Ugarte

 (AquíCom/03-08-14) Este 2 de agosto el presidente Evo Morales hizo una recopilación histórica de la fecha. En la parte final, manifestó que debe ser un día de fiesta, según el Decreto Supremo de 1937, que declara al 2 de agosto “Día del Indio”, emitido por el General Germán Busch.

Ese decreto homenajea la fundación del primer Núcleo Indigenal de Bolivia en la población de Warisata y dispone festejos con exposición de productos y artesanías con el objetivo de recuperar la identidad.

“Yo ratifico ese decreto compañeras y compañeros, hermanos y hermanas, en las ciudades aplicar este Decreto Supremo para recuperar nuestro autoestima, nuestra identidad, este decreto del 20 de julio de 1937”, señaló el 2 de agosto en un acto público, luego de dar lectura a la parte resolutiva del documento.

También la autoridad ratificó la aplicación del Decreto Supremo del 1945 del ex presidente  Gualberto Villarroel,  para la abolición de la servidumbre conocida como “pongueaje y mitanaje”.

Sin embargo, desde el gobierno de Morales no se efectuó ningún festejo como regularmente realiza en fechas como el 1 de mayo, Día de los Trabajadores o el 21 de junio, Año nuevo Aymara.

En la ciudad de La Paz la fecha pasó desapercibida; se realizó la tradicional Entrada Folklórica Universitaria, de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), no se supo de algún otro acto que se haya destacado. La Gobernación del departamento no realizó actividad alguna.

La primera autoridad del país criticó la Reforma Agraria de Víctor Paz Estensoro, del Movimiento Nacionalista Revolucionario, emitida también el 2 de agosto de 1953, que según él no dejó nada positivo a la población y, al contrario, una continuidad en la falta de respeto a la propiedad comunal o colectiva y un loteamiento de las tierras.

El Decreto Ley  de la Reforma Agraria (1953) estableció la restitución de las tierras, la anulación del pongueaje y de otras formas de explotación que persistían hasta mediados del siglo XX.

“Esa supuesta Reforma Agraria ¿Qué nos ha dejado a nosotros? Terratenientes, gamonales del oriente boliviano, del occidente, minifundio. Así los compañeros del lago Poopó que dicen, surcofundio”, cuestionó.

Con estas contradicciones acerca de una celebración o desazón del 2 de agosto de parte de la primera autoridad del país, ¿cómo queda el sector indígena de Bolivia? Si no existe un festejo oficial desde el gobierno que está encabezado por un indígena, mucho menos habrá de sus bases, aquellas que desde 1953, luego de la promulgación de la Reforma Agraria, festejaban por impulso de los gobiernos de turno, generalmente en la población de Ucureña, departamento de Cochabamba (AquíCom/03-08-14).