Testimonio de vida
Estudio Contaduría Pública y estoy en 3er curso. Trabajar y estudiar es difícil porque no alcanza el tiempo. Una quiere estudiar y terminar los trabajos, pero a veces el cuerpo ya no responde
Marcela Barrios B.
(AquíCom MTBB/05/10/2014). Mi nombre es Marina Jaqueline, vivo en Villa Dolores de El Alto. Trabajo como vendedora en un puesto de venta. Vendo pantalones de mujer, de dama. Trabajo en la mañana y en la tarde, más que todo. Vendo en la mañana cuando no tengo clases, pero, mayormente, vendo en la tarde, de lunes a sábado.
También estudio en la Universidad Mayor de San Andrés, en la carrera de Contaduría Pública. Estoy en tercer año y voy a clases en la mañana y por las noches. Tengo clases hasta medio día, algunos días y por la noche lunes, martes y miércoles.
Para mí es difícil trabajar y estudiar porque no alcanza el tiempo para estudiar todo, sólo una parte. Una quiere estudiar, pero estás cansada y no te deja mucho tiempo. Entonces hay que hacer las dos cosas, sí o sí.
Cuando estoy cansada, hago lo que puedo, ahora, ya no como antes que me amanecía para hacer mis trabajos. Yo quiero hacer todo, pero tu cuerpo ya no responde, por el cansancio. Así que sólo hago mis trabajos hasta donde alcanzo.
El puesto donde vendo, es de mi hermana. Yo le ayudo y me paga mensualmente, haya o no venta. Gano 400 bolivianos que gasto en fotocopias, internet, libros, investigaciones y pasajes, gastos que a veces surgen de imprevisto y también para vestirme. Mi hermana me da el almuerzo, o sea que no gasto en eso.
Ya deben ser cuatro años que trabajo con mi hermana. Más antes estaba con mi hermana en un restaurante. Allí trabajé unos dos años. Entonces, ya son seis años que trabajo con mi hermana.
Decidí trabajar y estudiar porque mi papá y mi mamá ya están mayores y ya no pueden trabajar. Entonces, ya no les puedo pedir, además, tengo una hermanita. A ella le ayudan un poco, tampoco mucho. Y así.
Ellos no tienen trabajo fijo. Mi mamá no está aquí, sólo mi papá. Él tiene sus cosas que va a vender y lo que gana es sólo para él. Entonces, no alcanzaría para mí más.
Mi papá vende dulces en el Coliseo Cerrado (Julio Borelli Viterito) y en el Teatro Municipal (Alberto Saavedra Pérez). Pero vende sobre todo cuando hay eventos, que no es muy seguido. Cuando hay eventos le genera dinero, le genera bien, pero cuando no, entonces tiene un poquito de ganancias.
Somos 11 hermanos y yo soy la penúltima. Mis otros hermanos trabajan individualmente. Ellos no les ayudan a mis papás, porque todos tienen ya sus familias.
Mi meta en la vida es terminar mi carrera y llegar a ser profesional y tal vez más adelante, hacer una maestría. En este momento me está yendo bien, no súper bien como quisiera. En una materia no estoy muy bien, pero en las demás bien (AquíCom MTBB/05/10/2014).