Claudia A. Villca Ugarte
(AquíCom 05-04-14) El Seguro de Salud Para Adultos Mayores (SSPAM) en el Hospital de Clínicas de la ciudad de La Paz, administrado por la alcaldía del municipio con contraparte del gobierno central, se mantiene con serias falencias que los “beneficiarios” tienen que sufrir cotidianamente.
Desde su implementación en este nosocomio, inicios del 2013, las dificultades son evidentes e innegables. Se observan desde la adquisición de fichas, para la atención médica, hasta la obtención de los medicamentos recetados por los galenos, pasando por los exámenes y estudios o análisis que son requeridos a los adultos mayores.
Una pequeña muestra. Los adultos mayores tienen que madrugar desde las 4 o 5 horas para salir de sus viviendas cuando aún reina la oscuridad, arriesgándose a serios peligros como asaltos o accidentes, ya que muchos no cuentan con una persona que les haga compañía en su traslado al nosocomio. En el lugar deben someterse al frío de la madrugada, en la intemperie, de pie, ya que no existen asientos para ellos, hasta que se inicie la atención con la distribución de fichas.
Eso demuestra un flagrante desinterés y falta de consideración de parte de las autoridades con este sector de la sociedad, por el cual “todos pasaremos”, y una franca vulneración de sus derechos contenidos en las leyes dictadas por el Estado, como la 369 de las Personas Adultas Mayores que regula sus derechos, garantías y deberes, así como la institucionalidad para su protección.
Llama la atención cómo las autoridades actuales realizan actividades de promoción de dicha norma, cuando no se aplica. La ministra de Justicia, Sandra Gutiérrez, estuvo el pasado 4 de abril en Cochabamba, socializando dicha Ley, hablando de “la vejez digna, sin discriminación ni violencia” que se garantiza con esa norma.
¿Cuándo se harán realidad estas leyes? ¿Cuándo existirá una verdadera implementación de la normativa por parte de las autoridades para favorecer a ese sector vulnerable? Entre tanto, está por demás que ciertos representantes gubernamentales flameen una bandera que no corresponde.
El seguro gratuito de salud para personas adultas mayores, que no cuentan con uno privado, debe mejorar porque ellos ya cumplieron con su aporte a la sociedad y merecen que se les garantice una “vejez digna” real (AquíCom 05-04-14).