Fidel Castro, “… el líder verdadero, el maestro...”

Ramiro Barrenechea Zambrana

Nunca he dudado de que Fidel fuera la personalidad más egregia del Siglo XX, el revolucionario por antonomasia, la encarnación de la dignidad humana, el líder verdadero, el maestro...

Pero en el inicio del Siglo XXI, esas cualidades brillan más aún, porque parece que la humanidad hubiera olvidado que no se trata de construir un mundo fraterno y de confort creciente para los seres humanos. Un lugar para el reencuentro y la paz, teniendo como guías a los enemigos de la humanidad, aunque sonrían frente a sus víctimas..

Como si ésta sólo necesitara de discursos y llamados a la fraternidad, "esfuerzos mutuos". Victimas y victimarios en un abrazo "olvidando el pasado".

Cuanta sabiduría entraña la reflexión de Fidel, sobre Barak Obama, porque desvela el rostro de la hipocresía, sin ofenderlo, desenmascara el cinismo, sin agredirlo.

El discurso "almibarado" de Obama, en Cuba,  es como los espejitos y abalorios, con que los conquistadores pensaban comprar la adhesión de los “conquistados”, para robarles el oro y la sangre.

El libreto de marketing de Obama, ha seducido a muchos. Tal vez algunos cubanos también crean en la "bondad" del tío Sam, que, como apunta Fidel, se olvidó de nombrar a los Sioux, Apaches, Comanches, etc. que fueron aniquilados en las cargas de caballería del general Custer que es el arquetipo de la construcción del un Estado sin resistencia. La desmemoria de Obama, no es producto de su ignorancia, sino de su displicencia.

Además de las atinadas reflexiones de Fidel sobre el África y la presencia de Cuba en ella, traídas a colación "inocentemente" por Obama, deseo agregar una sobre las alusiones desgraciadas al bloqueo como presunta "excusa" de Cuba para encubrir el fracaso de la Revolución y la amenaza encubierta de que el probable desbloqueo haga saltar en astillas lo construido por los cubanos en este medio siglo, para sustituirlo (¿como en la ex URSS?) por una sociedad sin principios, dominada por la mafia, que busca "retomar" su antigua colonia del juego y la diversión en los "weekends)..

Nadie puede atreverse a afirmar seriamente esos simplismos tan superficiales y faltos de imaginación. La Revolución Cubana ha abierto huellas imborrables para la humanidad, ha recuperado la dignidad de los pueblos, que a partir de esta experiencia, no tenemos dudas de que los sueños de la felicidad colectiva, igualitaria, pueden conseguirse cuando la conciencia y la acción son consecuentes.

Eso no se adquiere en los supermercados del "consumismo" depredador, sino en las gestas revolucionarias esenciales, en las que se triunfa o se muere si son verdadras, como lo diría el hermano de Fidel, el entrañable Comandante Che.

Estas reflexiones sobre el "buen vecino" en lo que sigue creyendo es su traspatio, no son advertencias de un aguafiestas, sino las sabias palabras de un conductor de pueblos. Me recuerdan a otras reflexiones, cuando la "Perestrika" era alabada por enemigos del comunismo y por muchos presuntos amigos. Como un rayo que quebrara la escena montada, Fidel se preguntaba si la historia nos estaba dando la oportunidad de descubrir que el tránsito del capitalismo al socialismo había costado sangre y dolor, en cambio podía ocurrir que el tránsito del socialismo al capitalismo se produciría sin derramar una sola gota de sangre. Todavía me estremecen esas palabras, ahora que observo, con estupor, que hay gente que se entusiasma con las sonrisas de Obama y creen que se puede construir la paz y la prosperidad de la mano de quienes tienen, como cimiento de su imperio, la explotación, la opresión, más despiadadas.

Tenía que ser Fidel, el que nos recordara que no se puede asaltar el cielo teniendo como socio al diablo.

Gracias por hacerme llegar el texto sobre estas reflexiones para la historia.