Elena: trabajé como empleada, hoy soy secretaria y estudio comunicación II

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Testimonio de vida

Marcela T. Barrios Borda

(AquíCom MTBB/24/07/2014). Mi nombre es Elena, estoy estudiando comunicación en la Universidad Mayor de San Andrés. Estoy en último año, pero me faltan materias, no hay cómo acabar. “Ahorita” vengo directo a mi clase. De mi trabajo estoy viniendo.

La comunicación es bonita. La comunicación tiene muchos temas y aéreas. Puedes hacer diferentes cosas. Por ejemplo, yo quiero hacer especialidad —era mi sueño desde pequeña— en radio y trabajar en  programas en una radio de aymara.

Yo hablo aymara y ese era mi sueño. Pero mi suerte. Como yo pagaba el alquiler y pagaba todo, la plata no me alcanzaba. Estaba en la radio, estaba en Pachakamasa con el tema de interculturalidad, pero no me alcanzaba porque el sueldo era muy poco, apenas me alcanzaba para mi alquiler, para pagar la luz y el agua.

Entonces, he buscado otra oportunidad y me ha aparecido esto, entonces, estoy bien también. He preferido este trabajo. Por eso he dejado el área de comunicación, a pesar que me gustaba y me gusta.

Ahora quiero hacer mi especialidad en el área de la investigación, que también me gusta. Pero sólo me falta leer mucho, porque no me alcanza el tiempo. Hay ratos, pienso renunciar a mi trabajo: Pero hay ratos pienso en mí, quién me va a mantener, eso es para mí más difícil.

Haciendo esfuerzo voy a hacer todo lo posible para terminar mi carrera, porque me faltan sólo dos materias. Quiero hacer mi tesis para aprender mejor la investigación. Esa es mi meta.

También soy dirigente de mi comunidad. Yo voy cada sábado porque en mi comunidad también me hicieron autoridad. Entonces, tengo que ir a la fuerza cada fin de semana, porque así son las obligaciones y las costumbres. Una tiene que cumplir las funciones.

Viajo cada fin de semana. Hay ratos me saco permiso a cuenta de vacación. Hay ratos me hago observar, porque en mi trabajo no saben que tengo que cumplir en mi pueblo. Me dicen: ¿Por qué estas pidiendo mucha vacación?, estas exagerando, me dicen. Pero qué puedo hacer, así son las funciones. Yo no puedo explicar todo a mi jefe, no se puede.

Mi cargo es secretaria de Organización de las mujeres. Me han obligado a ser. Yo no quise porque estaba estudiando y no quería perjudicarme. Entonces, como trabajaba le he dicho que no tengo tiempo. Asimismo, me posesionaron para que asuma esa responsabilidad. Y lo hice.

Es una organización donde reúnes a las mujeres de cada comunidad y cada catón. Mi provincia tiene cinco secciones, entonces cada sección tiene su central agraria. Coordinas con la central agraria, el ampliado, la reunión de los temas que se presenten en la comunidad, el tema que necesiten, como: el aniversario de cada municipio. Y hay que estar con las autoridades, con los alcaldes, con los diputados.

Tienes que coordinar si existe algún proyecto. Tienes que estar ahí porque estás como representante y también venimos a los ministerios. Por ejemplo, saneamiento estábamos realizando; después del saneamiento el Evo estaba dando proyectos. Entonces, las señoras dijeron: hay tantos proyectos, por qué ustedes no van. Por eso hemos ido a preguntar y gestionamos también eso.

Para trabajar de secretaria, he estudiado, pero a medias igual. Aquí en Eva Perón. Ahí he estudiado —en un instituto— dos años y lo he dejado ahí.

Esa parte me ha favorecido, pero no he sacado mi título porque como era pagado. 80 bolivianos pagaba esas veces, entonces ya no me alcanzaba, tenía que abandonar igual. Alquiler tenía que pagar, cualquier rato me quería botar la dueña de la casa, por eso.

Sí, mantengo a mis hermanos y hermanas. Les apoyo. Les he dicho que estudien, pero nunca he pensado en mí.

Yo debería estudiar, hay ratos digo no. Pero, no he tenido esa suerte que alguien me apoyara, pero yo ahora les apoyo a ellos, a ellas. Mis hermanas son profesoras y el otro de auditoría ha salido, el otro es abogado y el menor, es ingeniero. El otro recién va entrar, qué carrera le gustará.

Mi hermana menor se ha casado. Se ha quedado embarazada, a la fuerza ha tenido que casarse. Ella quería estudiar Auditoría y la otra, estudio ingeniería y sistemas, pero lo ha dejado por factor económico.

La mamá, el papá no siempre te alcanzan (te dan plata). Las ovejas no crecen en un mes, entonces a la fuerza tienes que abandonar. Mi menor está estudiando, para pasaje le ayuda mi mamá, con el alquiler de la casa yo le ayudo y nos sustentamos ambas.

Ahora mi meta es egresar de la carrera (de Comunicación, UMSA) y quiero trabajar como investigadora y optar a alguna beca de especialidad. Esa es mi meta.

Mi papá vive con mi madre, los dos viven. Hay ratos se han enfermado. Por ejemplo, el 2011 se ha enfermado mi madre, yo he tenido que abandonar todo, todo, el trabajo y la universidad.

Me he tenido que ir unos dos, tres, cuatro años, no me recuerdo. Fue el 2001, 2002, 2003, 2004, 2005, 2006. Me he ido al pueblo porque mi mamá no podía caminar, no podía hacer nada, inválida se ha vuelto.

Después de tanto hacer curar se ha recuperado, ha comenzado a caminar, se ha puesto normal. Simplemente, su mano tiene dificultad. Entonces, a la fuerza tuve que volver porque es mi madre y yo soy la mayor.

Es bonito también hacer chacra, me gusta también. Yo voy siempre a mi pueblo. Me gusta escarbar papa, sembrar, todo yo hago (AquíCom MTBB/24/07/2014).