La intolerancia en Huanuni protege la crisis

(AquíCom/14-08-014) La situación de la Empresa Minera Huanuni se ha ido agravando en los últimos meses debido a la baja de la cotización del estaño en el mercando internacional, un aliado casual en la producción minera, y la caída en la producción hasta en un 68% en el primer trimestre; sin embargo, la dirigencia conformada fundamentalmente por afiliados al partido de gobierno como Pedro Montes, candidato a senador, y Juan Carlos Trujillo, que juró apoyo al MAS en las próximas elecciones generales, niegan la situación de crisis, y por el contrario, califican de ‘traidores’ a quienes digan lo contrario y piden la ‘renuncia’ de las autoridades como ocurrió con el viceministro de Política Minera, Eugenio Mendoza.

Cada mes que pasa, la situación de Huanuni se hace más crítica. Hasta el primer semestre del año ya perdió 2 millones de dólares, en tanto el silencio de la dirigencia que sólo atina a desmentir que en ese ingenio se pagan elevados salarios.

Lamentablemente, antes de primar el criterio económico, prima el criterio político partidario en una ‘empresa social’, como la llama el gobierno, que hasta ahora no tiene la capacidad de reactivarse. Y mucho tiene que ver en esta situación las promesas incumplidas del Ejecutivo que, desde 2006, prometió ampliaciones y reestructuraciones que nunca cumplió.

Es importante reactivar Huanuni y decirles a sus dirigentes que más allá de una empresa social que beneficia con una fuente de trabajo a más de 4.600 trabajadores, también se trata de una empresa de todos los bolivianos, por lo que debe rendir frutos para todos (AquíCom/14-08-014).