Segunda vuelta confirma a Albarracín como rector de la UMSA

Crítica

La propaganda se disipa y la calma retorna a los universitarios

Wendy Pinto

(AquíCom/27-11-13) Unidad Universitaria (UU) ganó las elecciones para las máximas autoridades de la Universidad Mayor de San Andrés: rector y vicerrector. Las redes sociales tuvieron un papel muy importante a la hora de decidir.

Esta segunda vuelta de las elecciones no tuvo la intensidad que la primera. El silencio, la tranquilidad y hasta el clima se pusieron de acuerdo para el 26 de noviembre, día elegido para la última decisión.

Algunos universitarios dijeron que esto se debe a los dos candidatos que pasaron a la segunda ronda, Waldo Albarracín, de UU y Óscar Heredia, de Todo Cambia Todo. Otros manifestaron su desaprobación hacia ambos frentes, afirmando que su voto sería nulo.

Los más perspicaces, a pesar de anular su voto, escribieron sobre la papeleta “Galo rector” y le tomaron una fotografía, que fue publicada en las redes sociales como Facebook o Twitter.

Galo es el nombre del perro que resguarda la UMSA. Existen varias páginas en Internet que lo consideran el rector ideal, porque está vacunado contra la corrupción y hará realidad el sueño de todo universitario, la titulación gratuita.

El hecho es que la mayoría de los votos nulos contenían un mensaje similar, preferían a cualquier candidato antes que a los que se disputaban la segunda vuelta.

En Artes Plásticas, la asistencia de los electores se redujo aún más que la primera vez. Los pocos que sufragaron, decían que aunque no les gusta la política no perderían el derecho al voto. Un acto resaltante para la democracia.

Mientras que los de Arquitectura argumentaban que esta segunda vuelta tuvo más participación de los estudiantes, por lo que en algunos casos faltaron papeletas de sufragio. El Comité Electoral no entregó papeletas para todos los potenciales electores, basándose en que no todos los registrados vendrían a votar. Eso no interesa, lo que importa es que estén completas.

La facultad de Tecnología y la de Agronomía coincidieron en que la ausencia de los electores se sintió más el 26 de noviembre. No se registraron problemas, como el olvido de documentos, peleas entre militantes de los frentes o alguna irregularidad, el día pasó “sin novedad”.

Y es que la emoción de saber quién sería la primera autoridad de esta casa de estudios superiores se perdió con la segunda vuelta. Es más, ni siquiera los delegados de ambos frentes se alegraban de saber si alguno ganó en una mesa o en la otra.

El sol no brilló, el viento se hizo presente, los estudiantes en vez de votar, preferían relajarse en los predios de sus respectivas unidades académicas. Además, la sanción que establece el Comité Electoral no los intimidó porque, en muchos casos, tendrían receso, no les afectará en casi nada.

Albarracín ganó las elecciones, su propuesta está plasmada en varias hojas, que seguro muchos habrán desechado al carro basurero, pero no se confíe pocos o muchos estaremos vigilando que cumpla sus promesas. Si bien hizo todo lo posible para ser habilitado para ganar estas elecciones, también haga lo mismo por cumplir su palabra.

Heredia obtuvo el segundo lugar, como en la anterior elección. A veces no se puede tapar el sol con un dedo, el pueblo puede perdonar pero olvidar, jamás. Ser militante del ex mandatario que escapó a “Gringolandia”, es una marca en su frente que los universitarios no olvidarán nunca.

La intensidad y la emoción se fueron de vacaciones como los estudiantes. Hoy se tiene nuevo rector: saque de la crisis a la UMSA y será aplaudido y recordado como uno de los mejores, haga lo contrario y pare de contar. (Llamaremos a Galo)

Por fin, después de meses de campaña política, la comunidad universitaria descansará, se dedicará a lo que le corresponde que es estudiar y trabajar.

Lo satisfactorio de esta contienda electoral es que no se tendrá una similar hasta dentro de tres años. Adiós propaganda, que arruina las paredes de la UMSA, desperdicia árboles para plasmar ideas que ni siquiera se hacen realidad, llena de ruido la mente de los estudiantes y lo peor, genera más vesícula (AquíCom/27-11-13).