Una Bolivia grande requiere de un empresariado grande

Agenda Presidencial

Almuerzo de Evo Morales con la Federación de Empresarios Privados de Santa Cruz - Hotel Los Tajibos, Santa Cruz

(APLAUSOS)


Muchas gracias, al presidente de los empresarios privados del departamento de Santa Cruz, Gabriel Dabdoub y a todos sus afiliados, ministras, ministros, asambleístas que representan al departamento de Santa Cruz, invitados especiales, compañeras y compañeros de la prensa. Primero, cuando el compañero Carlos Romero me invitó, me informó: -“el empresariado te invita a un almuerzo”. No lo podía creer, pero después reaccioné y dije, de verdad estoy sintiendo la hospitalidad del cruceño. Muchas gracias por la invitación. 



(APLAUSOS)


Todos somos una familia, una familia grande, hay empresarios, todos tenemos propiedad privada, pequeña, muy pequeña, mediana, grande, algunos son empresarios. Me alegra escuchar al presidente de la Federación de Empresarios Privados de Santa Cruz, cuando decía: más seguridad jurídica. Por supuesto, más seguridad ciudadana, entiendo perfectamente, ya no es un reclamo decir que hay que dar seguridad, todos queremos más. Como político, también necesito más militantes para el MAS. 


(RISAS)


(APLAUSOS)


BOLIVIA QUIERE UN EMPRESARIADO GRANDE

Entonces, todos queremos más y más, lo más importante que quiero decirles, después de la Asamblea Constituyente, Bolivia quiere un empresariado grande. Esta mañana estuvimos en Río Grande, comentando con nuestros gerentes, estas grandes obras, las plantas separadoras, las termoeléctricas, no se adjudican nuestros empresarios. Siento que tenemos empresarios, lo digo de frente, sin ningún miedo, para construir pequeñas y medianas infraestructuras, pero, para grandes, no tenemos. Quisiera saber, en la Agenda 2025, ¿qué se necesita para que tengamos empresarios grandes, una gran empresa? Con la disculpa de algunos invitados extranjeros a este almuerzo, cuando una empresa extranjera se adjudica la construcción de una obra, las utilidades se van afuera.



Si un empresario boliviano se adjudica, las utilidades se quedan. Estaba comparando a la empresa privada minera con las cooperativas; las cooperativas mineras aportarán poco al Estado, pero las utilidades quedan, mientras que las empresas privadas mineras, extranjeras, pagan más impuestos, los impuestos quedan, pero las utilidades se van, esa es la diferencia. Por eso quisiéramos tener empresarios medianos y grandes, el Estado los necesita, el pueblo necesita empresarios grandes. Pero también he conocido y sigo conociendo, si  un empresario es político, les va mal y les va a ir mal si se meten a la política; no estoy amenazando, no estoy amedrentando, porque ¿cuál es el sentimiento del pueblo boliviano?


Cuando un empresario, teniendo plata, hace política, todos pensamos que ese empresario quiere usar la patria para ganar plata, plata para su empresa y no para el pueblo boliviano. Ese es el profundo sentimiento que tiene el pueblo boliviano. Cualquier nuevo profesional, cualquier nueva empresa, cuando empieza no es un gran empresario, pero ya es empresario pues empiezan de cero. Entiendo los problemas de seguridad, pero, realmente, deberíamos pensar y planificar, y no he escuchado, ni mediante el Vicepresidente, tal vez no me informó.


Tampoco el Ministro de Gobierno, para ver cómo podemos convertir al empresario boliviano en un gran empresario, para que esos proyectos están a cargo de nuestros empresarios, Bolivia necesita empresarios, esos deben ser los debates que tengamos. ¿Qué facilidades otorgamos?


Tenemos una  Ley de Servicios Financieros que les facilita para seguir siendo empresa, pero, ¿qué hay que hacer?, quisiera que me ayuden a entender, ¿qué necesitan?, repito, ustedes saben, tantas construcciones y va a seguir habiendo más. No quiero comentar el tema energético, ni el tema de agua o mercado, tal vez esta noche haya oportunidad para conversar, pero sólo quiero decirles este tema.


El tema de seguridad ciudadana, desde el último secuestro he estado informado, siento que había una desconfianza del empresariado frente el gobierno. Si hay desconfianza, no vamos a poder resolver nada, es importante unirnos en esos malos momentos que han pasado algunas familias, toda nuestra solidaridad. No saben, queridos empresarios, cómo sufro, me  pongo al lado del papá, de la mamá, del hijo secuestrado, de la familia. Pero, para que haya una cooperación, no puede haber desconfianza en el gobierno y en las instituciones, sino, no vamos a poder resolver,  debemos estar unidos todos para enfrentar esta clase de problemas. Después de la investigación de un grupo de expertos de la Policía Nacional, ha sido difícil tomar decisiones en el último secuestro, quiero que lo sepan, queríamos actuar antes de que se libere.


Hemos sido desviados por las familias, entiendo, no estoy cuestionando. Más antes hubiéramos desarticulado, tal vez el último, o penúltimo secuestro no hubiera habido. Pero, como decía nuestro Ministro de Gobierno, después de algunas reuniones con Inteligencia, y el último viaje del compañero Romero al exterior, tampoco ha sido un viaje de turismo, sino de trabajo, no quiero comentar eso. Tal vez en las reuniones privadas comentarlas, pero va avanzando muy bien la investigación, después de esta desarticulación en Beni.


Yo sé que duele, es un dolor para la región y para la nación, por supuesto que era muy grave esta situación. Solo pido un trabajo conjunto, unidos, con información, para rápidamente actuar. Lamentablemente no todos somos iguales, lo más grave es que sus amigos, compañeros de fiesta, del carnaval, están metido en esta clase de secuestros, eso no puedo entender. En la cultura indígena, campesina, somos compañeros y hermanos. Cómo puedo entender que dentro del empresariado, su mismo hermano, su mismo compañero, la misma comparsa, de la misma región, sean lo que operan con extranjeros, muy grave, por supuesto. No es que no conozco, he hecho seguimiento, conozco, sabemos, y seguimos informándonos más. Algún sector de la justicia no acompaña, es otra debilidad que tenemos, y por otro lado, en temas de tierra, nadie, por más que sea militante  del MAS, hermano campesino, compañero obrero o alguna autoridad, puede usar mi nombre, usar el nombre del Vicepresidente, de algún ministro, para negociar. Si usa mi nombre y otros nombres del gobierno, sea compañero, compañera, o hermano, están usando mal el nombre. Ni la justicia, ni ustedes, como empresarios, ni la Policía, pueden estar acatando el uso de nombre, porque eso me informaron, especialmente en el tema de tierras.


Entonces, hay mucho que hacer todavía, felizmente, en la parte financiera, vamos bien, ustedes saben bien esta situación, pero, lo más importante es seguir garantizando inversión para el crecimiento económico, y luego ese crecimiento democratizar para bien de todos y todas. Una vez  yo me reuní, cuando había ese comentario de la corrida bancaria, con el sector bancario, ASOBAN. “Ustedes ayuden a evitar, no hay corralito bancario, pero alguno de los empresarios hace correr ese rumor, crean desconfianza, zozobra. Había filas para retira la platita. Yo le decía al sector bancario, al sector financiero: pueden bloquear, pueden movilizarse, pueden molestar,  como lo están haciendo algunos sectores privados, empresarios políticos, a mí qué me afecta, no me hacen ningún daño, y tampoco a mi sector hacen daño. Históricamente hemos vivido en la pobreza, ¿quién pierde en esos conflictos? Pierde el empresariado; el verdadero empresario que invierte y trabaja por Bolivia, con responsabilidad empresarial, profesionalidad, con conciencia social o responsabilidad social, no pierde.

Todos tenemos derecho a hacer plata, pero legalmente, trabajando, no como antes, usando al pueblo, usando al Estado, usando  al gobierno, para hacer plata. Ahí no comparto, en eso vamos a tener diferencias, y los empresarios seamos honesto. Para quien invierte mi respeto, mi admiración. Cuando llegué a la reunión con el sector bancario, seguramente algunos están acá, en La Paz, se dieron cuenta, y además de eso explicaba: cuando yo bloqueaba el camino en el Chapare, qué harían algunos empresarios aquí; decían: “prefiero vivir con la piedra en la puerta que con la bala en mi boca”. Eso me ha hecho pensar ¿no? Y ¿qué hicimos? Hicimos transformaciones en base a la conciencia del pueblo, en base al voto, y no en base a la bala. 



Siento que el verdadero empresario gana con este proceso, hay movimiento económico; pero cuando el empresario político, el político que no es responsable con su pueblo, crea conflictos. A mí no me afecta eso, que aspiración yo tengo, jamás soñé ser presidente, ni diputado, entré al Chapare desde Orinoca a sobrevivir, a mejorar la economía, quería comprarme una casita y después casarme, ese era mi plan. Yo he visto desde el Chapare que no había soberanía, que no había dignidad, que había profundas diferencias económicas. 


Llegué al Chapare en plena dictadura de García Meza y por eso digo, el sindicato es mi escuela en temas de  principios ideológicos, ahí empecé a refrescar, pero los valores vienen de mi familia, y después ¿qué?, no hay ninguna ambición, pero, desde la dirección sindical es también importante el servicio al pueblo. Gracias a la conciencia del pueblo, tengo una oportunidad para servir  y estamos movilizados con nuestro hermano Vicepresidente, con el gabinete. Aquí los ministros, las ministras, saben cómo trabajamos en las reuniones de gabinete, pero no pensando en el negocio, ni en el beneficio, sino pensando en el pueblo boliviano, ese siempre será nuestro sentimiento y soplo. Quiero decirles a los empresarios que de verdad hacen empresa: sigan, no solamente necesitamos empresario como ustedes, sino empresarios grandes que se adueñen de estas grandes plantas, de industrias, de fábricas. Quiero que se preparen para ejecutar estas grandes obras del pueblo boliviano. 


Felicidades y muchas gracias 


(APLAUSOS)