Claudia Angélica Villca Ugarte
(AquíCom/16-10-14) El pasado 10 de septiembre, por una nota publicada en un medio de difusión impreso, nos enteramos de que la centenaria Alicia Tovar, viuda del reconocido futbolista orureño de antaño Jesús Bermudez, está recluida en el hogar “María Esther Quevedo” de la ciudad de La Paz. Se siente sola y desea con todas sus fuerzas ver a su hijo, que se encontraba en el vecino país de la Argentina.
Según el testimonio que Tovar dio a ese medio de difusión, no pierde la esperanza de volver a ver al hijo con el que perdió contacto hace mucho tiempo, desea que él sepa que ella está viva y espera encontrarlo.
La noticia se difundió en aquel medio de comunicación impreso, muchos la replicamos en las redes sociales. Algún otro medio de comunicación se preocupó también y anunció hacer los esfuerzos para contactar al hijo de Tovar.
Felizmente la historia parece tener un final feliz, pues, luego de un par de semanas, el mismo medio publicó otra nota en la que informó que los nietos de Tovar, enterados de la existencia de su abuela, se contactaron desde Argentina y dieron señales de que desean encontrarse con ella y conocerla; además, que no sólo tiene nietos, sino también bisnietos.
Esta es una prueba más de la fuerza que tiene la buena voluntad de las personas que se interesan en casos como ése. Un importante ejemplo que merece ser replicado y para ello no hace falta conocer a los familiares de grandes personalidades para colaborar a mucha gente que lo necesita.
En casos como ése, en el que alguien busca a su ser querido es importante, a veces, tan sólo basta difundir la información y con la fuerza de las redes sociales, que no tiene fronteras, llegar a los buscados o al menos a sus conocidos.
Más de un caso como el que comentamos fue resuelto satisfactoriamente de esa forma, haciendo felices a muchas personas y esa es la recompensa, la satisfacción de haber ayudado a alguien sólo hasta con un simple click de nuestras computadoras (AquíCom/16-10-14).